Gravados en Noya
Uno de los mayores alicientes del verano en la Barbanza es poder hacer un par de gravados de imágenes antiguas de iglesias, barcos o tipos gallegos, en el curso que anualmente organiza el Liceo de Noya bajo la dirección del artista Alfonso Costa.
Con la ayuda de las imprescindibles profesoras Antoñeta y Ana, uno se inicia en ese complejo mundo del aguafuerte, con el proceso de preparación de la plancha de cobre duro pulido y desengrasada, el barnizado y el dibujo directo de la imagen con el buril sobre la plancha de metal creando un surco o barba cuya misión es retener una mayor carga de tinta en la impresión final.
Una vez realizado el dibujo, teniendo en cuenta que la estampa final quedara invertida sobre el dibujo en la plancha, se pasa al primer mordido, breve, con percloruro en el caso del cobre, al granulado para crear textura con un pulverizado de acrilico o resina y al segundo y mas largo mordido con percloruro.
Después de limpiada la plancha del acrílico y el barniz se inicia la creación de la imagen con el sistema de aguatinta, desarrollando una escala de grises mediante la realización de reservas de espacios de la imagen con barniz y realizando sucesivas mordidas en el ácido durante breves periodos de tiempo, de modo que los espacios reservados primeramente nos darán tonos mas claros y los espacios reservados al final tonos mas obscuros.
La estampación es el proceso final, y para ello se prepara la plancha entintandola con el negro, el sepia o los colores de la tinta empleados en la imprenta, en el relieve y en las áreas y lineas mas profundas con la tarlatana.
Pasando finalmente la plancha entintada contra el papel húmedo por la prensa torculo se termina el proceso, de modo que la tinta contenida en la plancha se trasfiere al papel creándose la estampa final sobre el papel desde la imagen latente de la plancha, que es el resultado final del gravado.
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El curso duró una semana de intenso trabajo y dedicación y le permite a uno cambiar temporalmente el duro navegar con el Flash, por las nortadas de la ria de Muros, por el apacible ambiente del arte del gravado en los salones del ejemplar liceo de Noya.
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